Televisión Española sigue su cruzada contra Zarzuela. Ahora difunde rumores sobre la ruptura sentimental de la hermana de la Reina Letizia.

nformación sin contrastar e impropia de una cadena pública.

Telma Ortiz, este pasado 22 de septiembre en Madrid.

La relación entre Televisión Española y la Casa Real atraviesa su momento más delicado.

En Zarzuela ya no se interpreta como casualidad, sino como parte de una estrategia política desde Moncloa para debilitar a la Monarquía en el terreno mediático.

Tal y como les ha venido contando ESdiario, el primer aviso fue el cambio de franja de Audiencia Abierta, el único espacio de TVE dedicado a la actividad institucional de la Familia Real.

El programa no desapareció, pero perdió visibilidad y, además, se recortaron de manera notable los viajes internacionales de seguimiento a la agenda de los Reyes Felipe VI y Doña Letizia. Una decisión que en Zarzuela se recibió como un claro intento de reducir la proyección exterior de la Corona.

Después llegó el episodio del programa de Andreu Buenafuente en la televisión pública, que recurrió a la mofa contra el Rey Emérito parodiando con la canción del futbolista Sergio Ramos.

Una sátira que generó indignación en sectores institucionales y que se percibió como un gesto deliberado de erosión hacia la institución.

Y ahora, TVE añade un nuevo capítulo con la difusión de rumores íntimos sobre Telma Ortiz, hermana de la Reina Letizia.

En el programa D Corazón de La 1, la periodista Silvia Taulés relató detalles de la ruptura -que les contamos en ESdiario- con el abogado irlandés Robert Gavin Bonnar, desde sus problemas económicos hasta discusiones privadas en torno a la publicación de la novela El cuarto poder.

Incluso deslizó la existencia de “situaciones escabrosas” que habrían hecho imposible la reconciliación.

Lo grave no es solo la exposición pública de una separación discreta, sino que se haga desde la televisión pública, que debería extremar la prudencia en cuestiones de carácter íntimo y familiar, especialmente cuando afectan a la Casa Real.

Tanto en Zarzuela como en la propia Reina Letizia hay incomodidad por la emisión de este tipo de contenidos, que consideran un ataque innecesario y dañino.

Así, el marco resulta evidente: TVE se ha convertido en escenario de una guerra política de Moncloa contra la Corona.

Del cambio de Audiencia Abierta y los recortes en cobertura internacional, a las burlas sobre el Rey Juan Carlos y ahora los rumores sobre Telma Ortiz, la secuencia dibuja un patrón.

Lo que para la televisión pública puede parecer entretenimiento, para la Casa Real es un pulso directo a su imagen y a su legitimidad institucional.

Y la pregunta queda en el aire: ¿hasta dónde se usará TVE como ariete contra la Corona? La maquinaria de propagada de Pedro Sánchez, con la inestimable colaboración de su hombre en RTVE, José Pablo López, parecen no conocer techo.