Susanna Griso no logra contenerse y se va de la lengua en directo: “Pero bueno, ¿se puede ser más caradura? Perdonadme que sea así”.
La presentadora de ‘Espejo Público’ no ha podido contenerse ante las últimas declaraciones de Irene Montero.

La nueva polémica con las pulseras de control telemático de agresores machistas, llamadas popularmente ‘pulseras antimaltrato’, está dando mucho de qué hablar y hay dos grandes señaladas: la actual ministra de Igualdad, Ana Redondo, y la exministra Irene Montero.
Las incidencias en estos dispositivos, según han denunciado varios sectores, se habrían disparado en el último año, lo que ha provocado críticas hacia el Gobierno.
Este martes, Esther Fernández Arjonilla, jueza especializada en violencia de género de Pamplona, ha explicado que siempre ha habido algunas incidencias en estos aparatos, pero ha confirmado en ‘Espejo Público‘ que en los últimos tiempos “las incidencias han aumentado más“.
El motivo de este cambio residiría en el cambio de contrato que impulsó Irene Montero durante su mandato como ministra pero que no se efectuó hasta que Ana Redondo ya estaba en el cargo.
La gestión de estos dispositivos, con el cambio de contrato, pasó de Telefónica a Vodafone y a Securitas.
¿Y qué está diciendo Podemos de todo esto? Que las pulseras “no han fallado en ningún momento” y que sólo hubo una “dificultad temporal de acceso a la información” durante el cambio de contrato.
“Es un bulo decir que las pulseras han fallado, es un bulo decir que las mujeres han estado desprotegidas“, insistía el secretario de Organización y portavoz de Podemos, Pablo Fernández.
Exactamente en la misma línea han ido las declaraciones que ha hecho este mismo martes Irene Montero en TV3, donde se ha defendido alegando que con el cambio lo que buscaban era “mejorar el sistema“.
Ha vuelto a decir que esto es “una mentira” que ha lanzado la derecha, “un gran bulo”, y que lo único que se ha producido es “una incapacidad temporal para extraer algunos datos“.
Al escuchar estas palabras, Susanna Griso no ha ocultado su indignación.
Pero lo que ha hecho estallar a la presentadora de Antena 3 ha sido que Montero haya insistido en que ella ya no era ministra cuando se produce esa migración de datos, por el cambio de contrato, que habría dado problemas.
“Pero bueno, ¿se puede ser más caradura? Perdonadme que sea así“, ha soltado la conductora del programa, refiriéndose a la extitular de Igualdad.
La reacción de Susanna Griso en ‘Espejo Público’ refleja el hartazgo de muchos ciudadanos ante la falta de respuestas claras y el uso político de un tema tan sensible como la violencia de género.
Griso, que lleva años denunciando la precariedad de los recursos destinados a la protección de las víctimas, ha exigido transparencia y responsabilidad a los dirigentes públicos, recordando que la seguridad de las mujeres debe estar por encima de cualquier interés partidista.
Las redes sociales se han hecho eco de la intervención de Griso, con miles de usuarios compartiendo su indignación y reclamando explicaciones más contundentes por parte de los responsables políticos.
La polémica ha reabierto el debate sobre la eficacia de las pulseras antimaltrato y la necesidad de invertir en tecnología y formación para garantizar la protección real de las víctimas.
Los expertos insisten en que la lucha contra la violencia de género requiere un compromiso firme y recursos suficientes, y advierten que cualquier fallo en el sistema puede tener consecuencias irreparables.
La crisis de las pulseras antimaltrato ha puesto en evidencia las debilidades del sistema de protección y la importancia de una gestión profesional y transparente.
La exigencia de Susanna Griso y de otros periodistas y activistas es clara: los responsables políticos deben asumir sus errores, informar con rigor y garantizar que las víctimas de violencia de género cuentan con todas las herramientas necesarias para vivir seguras.
El debate está abierto, y la sociedad exige respuestas.