El rey Felipe rompe su silencio y admite el rumor que circula sobre Juan Carlos I
Lo último sucedido con Juan Carlos I obliga al rey Felipe a reaccionar y a mostrar lo que opina sobre su padre
Lo último sucedido con Juan Carlos I ha obligado al rey Felipe a reaccionar y a confirmar lo que siente verdaderamente por su padre.
Desde hace años, existe un distanciamiento claro entre ambos, pero eso no impide que el emérito despierte sentimientos en su hijo.
Prueba de ello es cómo Felipe se ha tomado lo sucedido en TVE, donde Juan Carlos fue objeto de mofa y burla.
El entorno del rey ha roto su silencio, y ha manifestado qué sucedió entre las paredes de la Zarzuela.
El rey Felipe reacciona a lo último sobre Juan Carlos I
Juan Carlos I no ha evitado con su exilio que su nombre no esté vinculado a las polémicas.
Estas le preceden y es inevitable en su nombre salga a la palestra. Aunque en esta ocasión, la reacción no ha tardado en producirse en el rey Felipe.
Todo se desencadenó en el estreno de la segunda temporada del programa que conduce Andreu Buenafuente en TV.
El espacio arrancó con una parodia de Juan Carlos I que no sentó nada bien en la Zarzuela. El rey Felipe rompió su silencio y confesó que el sketch estaba “fuera de lugar”.
Aunque la relación entre rey Felipe y Juan Carlos atraviese momentos tensos, Felipe confirmó el rumor de que no acepta que se sobrepasen ciertos límites.
Desde lo alto de la Corona se considera que ese gag humorístico ha cruzado líneas rojas en el respeto institucional.
En Zarzuela el clima es de malestar: se cree que la sátira pone en entredicho la dignidad de la figura del padre del rey Felipe.
Si bien afirman que, desde la institución, este malestar no se manifestará de manera pública.
El sketch utilizó la canción de Sergio Ramos para bromear sobre la situación de Juan Carlos I, mezclando deporte, música y humor.
Lo que en principio podía parecer una simple parodia ha saltado al primer plano del debate sobre los límites de la sátira.
Para el rey Felipe la cosa está clara: hay ciertas líneas que no deberían sobrepasarse y lo sucedido en TVE las sobrepasó.
El rey Felipe no acepta las bromas sobre Juan Carlos I
Para Felipe, la institución real debe preservarse con respeto, incluso en tiempos de críticas.
Aunque el distanciamiento con su padre es un asunto conocido, no consiente que se organice un espectáculo público que degrade su legado familiar.
A pesar de que haya sido el propio Juan Carlos el primero en dañar la imagen no solo de la institución, sino de su familia.
Ese malestar del rey va más allá de lo personal.
Tiene un componente institucional, de cuidar la imagen de la Corona en los medios de comunicación públicos. No se trata solo de relaciones privadas, sino de imagen y respeto.
Por ello, desde Palacio califican de “escándalo” lo sucedido y acusan al programa de haberse extralimitado.
No obstante, el Consejo de Administración de TVE considera que no hubo intencionalidad de faltar al respeto. Por lo que no emitirán ningún comunicado al respecto.
Pero en Palacio opinan que sí se ha sobrepasado un umbral, uno que define cuándo el humor deja de ser aceptable para convertirse en agravio.
El debate se instala entre quienes defienden la libertad de expresión mediante la parodia, y quienes sostienen que algunas líneas no deberían pasarse.
Sobre todo cuando se trata de la figura de Juan Carlos I, padre del rey Felipe.
Y es que, desde Zarzuela, se trata de mejorar la imagen de la monarquía borrando el pasado más turbio del emérito.
Actuaciones como la del programa de Buenafuente, inciden en resaltar las polémicas de Juan Carlos, afectando al presente y al futuro de la institución. Lo que complica la tarea del rey Felipe.
