Muere Javier Marinque, actor de ‘Camera café’, a los 56 años.
Ha sido la Academia de Cine quien ha anunciado este viernes, 3 de octubre, que el intérprete de ‘Mi gran noche’ ha fallecido.
El mundo del cine llora la pérdida de Javier Manrique. Ha sido este viernes, 3 de octubre, cuando se ha conocido la muerte del actor a los 56 años, conocido, entre otras cosas por su papel en ‘Camera café’.
A través de un comunicado, emitido por la Academia de Cine en redes sociales, se ha anunciado el deceso que ha conmocionado a la industria del entretenimiento.
“Fallece el actor Javier Manrique que participó en películas como ‘Mi gran noche’, ‘Todo es mentira’, ‘El día de la bestia’, ‘Así en el cielo como en la tierra’ o, ‘Más que amor, frenesí'”, se puede leer en la misiva difundida en X (antiguo Twitter). Por ahora, no han trascendido detalles de las causas de su muerte.
Nacido un 27 de noviembre de 1968 en Lima (Perú), logró consagrarse como actor en el séptimo arte.
Habituales fueron sus trabajos con el director Álex de la Iglesia, con el que hizo varias películas.
Dedicó toda su vida a la interpretación, desde que debutó en el año 1994, bajo las órdenes de Álvaro Fernández Armero con el film ‘Sentimos las molestias’.
Desde entonces, Javier Manrique se consolidó en nuestro país como uno de los actores más consagrados, tanto del cine como de la televisión.
Formó parte del mundo televisivo gracias a sus intervenciones en míticas series como ‘Farmacia de guardia’, ‘Turno de oficio’, ‘La casa de los líos’, así como en ‘Hospital Central’ o ‘Centro Médico’, aunque tuvo una mayor presencia en ficciones como; ‘Este es mi barrio’ o ‘Jacinto Durante, representante’, en la que ejercía como principal protagonista.
En el cine, participó en ‘El día de la bestia'(1995), de Álex de la Iglesia, con quien volvió a trabajar tiempo después en ‘Las brujas de Zugarramurdi’ (2013) y ‘Mi gran noche’ (2015). Su carrera cinematográfica fue ‘in crescendo’ y continuó acumulando títulos como ‘Más que amor, frenesí’ o ‘El árbol del penitente’.
Memorable también fue su participación en ‘Camera café’, donde se metió en el papel de Lorenzo.
Se trataba de una miniserie de humor, adaptada de un formato originario de Francia, en la que se narraban historias a modo de cámara oculta en las que los empleados de una oficina acudían a la máquina de café para escaquearse del trabajo y contar situaciones, tanto personales y profesionales.
Fue entonces donde Javier Manrique compartió set con nombres propios del cine patrio como Arturo Valls, Ana Millán, Carlos Chamarro, Luis Varela o Marta Belenguer, entre otros.
Fue en 2018 cuando Javier Manrique tomó una importante decisión que marcó su futuro, dado que tomó la determinación de ejercer como representante de actores en Manrique Mangement, acompañando así en su carrera a actores y actrices como Jonathan Alonso, Marco Cáceres, entre otros.
La noticia de su fallecimiento ha generado una profunda tristeza en el ámbito cultural español.
La Academia de Cine, a través de un comunicado difundido en redes sociales, ha expresado su pesar por la pérdida de un actor que participó en películas tan emblemáticas como ‘Mi gran noche’, ‘Todo es mentira’, ‘El día de la bestia’, ‘Así en el cielo como en la tierra’ y ‘Más que amor, frenesí’.
Por el momento, no han trascendido detalles sobre las causas de su muerte, lo que ha intensificado el sentimiento de conmoción entre quienes compartieron escenario y proyectos con él.
Compañeros de profesión, directores y seguidores han inundado las redes sociales con mensajes de condolencia y reconocimiento.
La figura de Javier Manrique se ha convertido en símbolo de una generación de actores que, desde la humildad y el esfuerzo, lograron transformar el panorama audiovisual español.
Su capacidad para abordar tanto la comedia como el drama, su versatilidad y su cercanía con el público le han asegurado un lugar privilegiado en la memoria colectiva.
El fallecimiento de Javier Manrique representa una pérdida irreparable para el cine y la televisión en España.
Su legado permanece vivo en cada una de sus interpretaciones, en los recuerdos de quienes disfrutaron de su talento y en la huella que dejó en las nuevas generaciones de artistas.
La industria del entretenimiento despide a un actor único, cuya pasión por la interpretación y cuya generosidad profesional seguirán inspirando a quienes sueñan con hacer del arte dramático su forma de vida.