Adara Molinero, destrozada, revela cómo se siente tras pedir abandonar ‘Supervivientes All Stars 2’: “Estoy desubicada, débil”.

 

 

 

 

 

La concursante ha explicado en qué estado se encuentra antes de tomar la decisión definitiva de si abandonar o no el programa.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

La expulsión de su madre, Elena Rodríguez, ha supuesto un auténtico jarro de agua fría para Adara Molinero.

 

 

La concursante ha activado el protocolo de abandono de ‘Supervivientes All Stars 2’ y lo ha hecho después de perder los nervios tras una discusión con sus compañeros.

 

 

La llegada de un fuerte temporal también ha hecho mella en ella.

 

 

Este domingo, durante ‘Conexión Honduras’, la madrileña ha explicado cómo se siente antes de tomar una firme decisión. 

 

 

 

 

 

Antes de que comenzara ‘Conexión Honduras’, Sandra Barneda intervenía en directo en ‘Informativos Telecinco’ para avanzar lo que estaba ocurriendo con Adara Molinero en el concurso.

 

 

La presentadora explicaba que estaba aislada de sus compañeros y sería esta noche cuando tenga que tomar la decisión de irse o quedarse en el concurso.

 

 

La también escritora se mostraba muy sincera y admitía que jamás había visto así a la joven. “Veremos qué ocurre, todo puede pasar”, añadía.

 

 

“¿Cómo estás?”, le preguntaba Sandra Barneda a Adara Molinero nada más conectar con ella.

 

 

“Estoy”, le respondía con el semblante serio. La presentadora despedía la conexión durante unos minutos y le preguntaba a su defensora que cómo veía a su amiga.

 

 

Esta aseguraba que no la veía bien y que era normal que se estuviera planteando abandonar el programa.

 

 

Después, la joven explicaba cómo se sentía tras activar el protocolo de abandono.

 

 

“Estoy desubicada, desbordada, muchas cosas… Estoy débil. Sí, sabía a lo que venía.

 

 

Te haces una idea. Imaginas a dónde vas. Recordaba cómo fue mi edición, pero esto lo triplica por todos lados.

 

 

Es mucho peor, mucho más duro. Me da pena que desde casa no se puede ver la dureza”, justificaba Adara Molinero.

 

 

Después, reconocía que le dolía mucho verse en el estado en el que estaba cuando pidió abandonar el concurso.

 

 

Adara Molinero, al límite, activa el protocolo de abandono.

 

 

 

 

 

La organización del programa ha emitido unas imágenes en las que vemos a Adara Molinero completamente fuera de sí, al límite. Se mostraba muy nerviosa por todo lo que estaba ocurriendo en la isla y aseguraba que no podía más.

 

 

“No quiero más, no quiero estar más aquí”, decía sollozando.

 

 

Como decíamos, esto se producía después de que tuviera una enésima discusión con sus compañeros. Además, las condiciones meteorológicas también pasaban factura.

 

 

“Por favor, llama a quien sea, que me largo. Me siento atrapada aquí.

 

 

Esto es terrible. No quiero más, no quiero estar más aquí. No quiero oler más a pescado, ni dormir en el suelo.

 

 

Ya basta, he llegado a mi límite. Que me saquen, que me saquen, lo pido por favor”, gritaba.

 

 

Un miembro del equipo de ‘Supervivientes All Stars 2’ le preguntaba que si quería activar el protocolo de abandono y la madrileña respondía afirmativamente.

 

 

Los problemas económicos de Adara Molinero y su familia.

 

 

 

 

Horas antes de que Elena Rodríguez fuera expulsada, Adara Molinero se sinceraba por completo con Tony Spina y le contaba los problemas económicos a los que habían tenido que hacer frente en su familia.

 

 

La que fuera azafata de avión reconocía que era su madre la que los había criado sola.

 

 

Explicaba que se levantaba a las seis de la mañana y siempre estaba agotada y nerviosa.

 

 

“Cuando llegaba a final de mes, muchas veces no había en la nevera, la desesperación que tenía que sentir de… tengo dos y no llego. Pero nunca me ha dejado, siempre ha estado ahí”, decía.

 

 

 

La madre de Adara pudo escuchar estas declaraciones. Sobre ellas, insistía en que nunca supo cómo lo hizo.

 

 

Entre lágrimas, admitía que había sido muy duro, aunque no quería ponerse como ejemplo.

 

 

“Como todos los padres y madres separados. Había meses que llegabas y otros que no, que doblabas el turno o trabajaba de 12 en 12 horas.

 

 

Gracias a Dios, en mi nevera ha habido comida, pero no ha habido caprichos. En ese momento, tenías que mirar mucho por el dinero que te gastabas mes a mes”, afirmaba.

 

 

 

Antes de abandonar La Palapa, Elena Rodríguez le pedía a su hija que continuara luchando hasta llegar al final del concurso.

 

 

Era plenamente consciente de que le iba a resultar difícil por todos los frentes que tenía abierto, pero le instaba a que no perdiera la compostura.

 

 

“Yo me voy feliz, mi vida está ahí fuera. Quiero que esto lo luches semana a semana.

 

 

Disfruta, relájate, disfruta de este paisaje precio. Lucha por lo tuyo, también te pertenece.

 

 

Yo desde fuera te defenderé todo lo que pueda. Tú lucha por esto. Piensa por quién estás aquí. Estoy tan orgullosa de ti”, le decía.