La polémica crece en RTVE después de que el Partido Popular solicitara la exclusión de Sarah Santaolalla de la lista de colaboradores, debido a unas declaraciones consideradas ofensivas para millones de españoles, poniendo en jaque la imagen y la credibilidad de la televisión pública ante la opinión nacional. Esto ha desatado un debate sobre la ética, la responsabilidad y la libertad de expresión en la televisión. ¿Qué se esconde realmente detrás de las acusaciones dirigidas a Sarah Santaolalla?(NQ)