Pilar Vidal no se ha mordido la lengua.

Pilar Vidal en ‘La Roca’ y Kiko Rivera
La colaboradora de La Roca mostró este fin de semana su indignación tras la entrevista que Kiko Rivera concedió a ¡De Viernes! en Telecinco, en la que habló con detalle de su ruptura con Irene Rosales, pese a haber asegurado en varias ocasiones que jamás volvería a sentarse en un plató para tratar este tema.
La reacción en La Sexta no se hizo esperar.
El equipo del programa presentado por Nuria Roca analizó los titulares que dejó el hijo de Isabel Pantoja y, entre las voces más críticas, destacó la de Pilar Vidal, quien cuestionó la coherencia del Dj y su manera de exponer la situación emocional de su exmujer ante las cámaras.
Una entrevista que reactivó el debate mediático
Kiko Rivera reapareció esta semana en De Viernes para relatar sin filtros los motivos de su separación de Irene Rosales, madre de sus hijas.
Durante la conversación con Santi Acosta, entró en detalles sobre decisiones, desencuentros y vivencias personales.
Además, llegó a comentar que no le agradaba que Irene tuviera una nueva ilusión sentimental, algo que generó debate de inmediato.
Estas declaraciones provocaron sorpresa en muchos espectadores, ya que Irene ha hablado de su nueva etapa con serenidad y discreción.
En Y ahora Sonsoles, la exmujer de Kiko Rivera confirmó que está ilusionada y abierta a comenzar una nueva fase de su vida, siempre priorizando a sus hijas.
Pilar Vidal, muy crítica con las palabras de Kiko Rivera
En pleno análisis televisivo, Pilar Vidal fue contundente. Según comentó, Rivera había incumplido su palabra de no volver a hablar públicamente de su ruptura.
“Kiko Rivera no tiene vergüenza ni la conoce”, afirmó indignada.
La periodista explicó que le parecía incoherente que tras reconocer comportamientos que afectaron a su matrimonio, se mostrara molesto por la situación actual de Irene.

Vidal también quiso destacar la actitud respetuosa de Rosales, quien, a diferencia de Kiko, ha evitado profundizar en detalles personales durante y después de la separación.
Defensa de Irene Rosales: “Yo me la creo”
La periodista fue clara al posicionarse del lado de Irene Rosales. Según comentó, la versión de Irene siempre se ha mostrado coherente y sin ánimo de crear polémica.
“Yo me creo a Irene. Irene lo ha dejado claro”, insistió Pilar Vidal.
Explicó además que la nueva ilusión sentimental de Irene no surgió de manera precipitada, sino tras conocerse de forma natural, ya que la persona en cuestión trabajó instalando césped artificial en su vivienda.
Para Pilar, Irene está viviendo su proceso de forma madura, protegiendo a sus hijas y construyendo un nuevo rumbo sin exponer su vida privada más de lo necesario.
El comentario que más indignación generó
Uno de los puntos que más polémica provocó fue la reflexión de Kiko Rivera sobre sus infidelidades.
Durante la entrevista, el Dj reconoció que “no es algo de lo que me sienta orgulloso” y que en algunas ocasiones Irene se enteraba, mientras que en otras él mismo se lo contaba.
También añadió que la desgastada situación matrimonial facilitaba que “sucedieran cosas que no deben suceder”.
Su frase más polémica, sin embargo, llegó cuando aseguró que las repetidas oportunidades que Irene le daba “desgastaban todavía más el matrimonio”.
Esa parte fue la que irritó profundamente a Pilar Vidal —y también a Nuria Roca—, ya que consideraron injusto responsabilizar a Irene del cansancio emocional que provocaron sus propias acciones.
“¿Perdona?”, exclamó Pilar, sorprendida.
“Encima que te perdona”, añadió Nuria Roca, visiblemente impactada por la declaración del músico.
Una reacción que refleja un debate más grande
Las declaraciones de Kiko Rivera han generado ondas mediáticas porque no solo hablan de una separación sentimental, sino de comportamientos, responsabilidades y percepciones en la pareja.
Para algunos colaboradores, estas afirmaciones muestran una visión desequilibrada de lo ocurrido.
El análisis en La Roca buscaba precisamente contextualizar estas palabras y reflexionar sobre el impacto emocional que tienen las historias públicas cuando se exponen de manera selectiva.
La reacción del público también ha sido notable, especialmente en redes sociales, donde muchos usuarios comentaron la falta de coherencia entre la actitud de Kiko y sus propias confesiones.
La perspectiva de Irene Rosales
Aunque Irene ha preferido mantenerse al margen de polémicas, sus intervenciones han transmitido serenidad.
En Y ahora Sonsoles, habló de su nueva etapa con prudencia y honestidad.
Reconoció que está ilusionada y que se siente en un momento personal positivo.
Su prioridad, insistió, sigue siendo el bienestar de sus hijas y la estabilidad familiar.
Esta actitud contrasta con las declaraciones expuestas por Kiko en el programa de Telecinco, lo que ha provocado que muchos colaboradores —entre ellos Pilar Vidal— valoren la postura de Irene como más madura y equilibrada.
Un tema que seguirá dando que hablar
El ámbito mediático siempre reacciona con intensidad ante historias sentimentales relacionadas con personajes públicos, y el caso de Kiko Rivera e Irene Rosales no es la excepción.
La combinación de declaraciones emocionales, detalles íntimos y contradicciones públicas amplifica el impacto de cada palabra pronunciada en televisión.
La Roca dedicó gran parte de su debate a contextualizar este episodio, explicando cómo la repercusión pública afecta tanto al entorno personal como profesional de los involucrados.
Con cada nueva entrevista o comentario, la historia avanza y se reinterpreta.
El público, acostumbrado a seguir los movimientos del universo Pantoja, observa con interés cada reacción, cada frase y cada gesto.
Un debate sobre coherencia y responsabilidad
La intervención de Pilar Vidal no solo expresó indignación, sino que abrió un espacio de reflexión sobre la consistencia entre las palabras y los actos.
Cuando una figura pública decide narrar su versión en televisión, debe tener en cuenta el impacto de sus declaraciones y la imagen que proyecta.
Kiko Rivera ha ofrecido su visión, pero también ha generado un debate sobre la coherencia comunicativa y la responsabilidad emocional.
Por su parte, Irene Rosales ha mostrado discreción y serenidad, ganándose el apoyo de muchos colaboradores y espectadores.
Todo indica que esta historia seguirá generando titulares, análisis televisivos y conversación social.