La Audiencia de Madrid ha condenado al exrepresentante a dos años de cárcel por la apropiación ilegal de los 475.571 euros que pertenecían a la colaboradora de televisión.
Toño Sanchís llega a los Juzgados de Plaza Castilla
La Audiencia de Madrid ha condenado a Toño Sanchís a dos años de cárcel por la apropiación ilegal de 475.571 euros, cantidad que se figura en la sentencia, que pertenecían a Belén Esteban. Según la resolución, a la que ha tenido acceso EFE, el exrepresentante se valió de la “confianza plena” de la colaboradora de televisión para cobrarle una comisión superior a la estipulada en su contrato.
Toño Sanchís paseando por las inmediaciones de su casa
Además de la condena de dos años de cárcel, a Toño Sanchís también se le ha impuesto una multa de 2.100 euros y la obligación de indemnizar a Belén Esteban con una cantidad que aún no ha sido fijada.
Según la agencia de noticias, esta se determinará más adelante restando al casi medio millón de euros que se apropió de manera indebida los 49.000 euros que ya pagó a la colaboradora en un proceso civil anterior.
En aquel procedimiento previo, se sentenció a la agencia de representación de Sanchís a abonar a Belén Esteban un total de 388.868 euros.
Sin embargo, la colaboradora de ‘No Somos Nadie’ solo recibió una parte en efectivo y 375.000 euros mediante la cesión de una vivienda en Villanueva del Pardillo, que estaba hipotecada por más de 200.000 euros y que posteriormente vendió.
Belén Esteban junto a su exrepresentante, Toño Sanchís
La sentencia de la Audiencia de Madrid concluye ahora que entre el 13 de mayo de 2009 y el 2015, Toño Sanchís recibió cerca de 400.000 euros “al aplicar una comisión superior al 20% establecido en el contrato” firmado entre su agencia y la empresa de Belén Esteban.
“La confianza que tenía depositada doña Belén Esteban en el acusado señor Sanchís García era plena, de tal forma que la señora Esteban no supervisa la corrección de los cálculos del porcentaje pactado, limitándose a percibir las cantidades que le eran abonadas, hasta que en el año 2015 detecta irregularidades”, se lee en la sentencia a la que ha tenido acceso EFE.
También se acredita que la relación entre ambos era de “estrecha amistad” por lo que la tertuliana “se desentendía de sus asuntos poniéndolos completamente en manos del acusado”.
