Related Posts
La princesa Leonor y la tiara que no puede llevar… todavía. María José Gómez Verdú, experta en protocolo, lo deja claro: “El uso de la tiara está reservado a las mujeres casadas.” Pero sus palabras llegan en un momento en el que Leonor empieza a romper moldes, a ganar presencia y a despertar rumores dentro y fuera del Palacio. ¿Por qué esta advertencia justo ahora?
La infanta Sofía deja Lisboa por unos días para cumplir un plan secreto en Madrid… y lo hace sola, sin Letizia, Felipe ni Leonor. Fuentes cercanas aseguran que la hija menor de los reyes ha regresado discretamente a la capital por un motivo aún no revelado. Ni protocolo, ni acto oficial: un viaje personal que ha sorprendido incluso dentro del entorno de Zarzuela. ¿Qué hay detrás de esta misteriosa escapada?
Nadie lo esperaba… pero Antonio Maestre lo hizo. En su nuevo libro, el periodista disecciona sin piedad los años más oscuros del reinado de Juan Carlos I, revelando lo que muchos callaron durante décadas. Con datos, nombres y silencios incómodos, Maestre no escribe una biografía: redacta una sentencia. Y su veredicto no deja espacio para la duda ni la redención. Lo que parecía una historia de servicio y patriotismo… termina convertida en una caída que todavía duele en Zarzuela.
Nadie imaginaba que el cuento de hadas de Juan Carlos y Sofía comenzaría con silencios helados y miradas perdidas. En su primer viaje juntos, apenas se hablaron, como dos extraños condenados a fingir amor ante las cámaras. Todo parecía calculado, pero detrás de los flashes se escondía una tensión insoportable. Y aquella noche, la del “sí, quiero”, se convirtió en un grito ahogado entre lágrimas, reproches… y un vestido destrozado. Lo que ocurrió en su luna de miel sigue siendo el secreto más incómodo de la monarquía española.
“No hay duda.” Con esas tres palabras, el tribunal ha puesto punto final a una de las defensas más tensas del entorno de Ayuso. Lo que parecía un ataque político se ha convertido en una sentencia moral: los procedimientos en las residencias no solo fueron erróneos, sino “vergonzosos”. Detrás del lenguaje jurídico se esconde una historia de abandono, órdenes contradictorias y silencios cómplices. Lo que el auto revela… nadie estaba preparado para leerlo.