La reina Letizia impone una norma que afectará a su relación con el rey Felipe
La reina Letizia sigue una costumbre fuera de Palacio que puede poner en riesgo su matrimonio con el rey Felipe
La reina Letizia siempre se ha caracterizado por seguir unas pautas estrictas en su día a día.
Si bien mantener una vida sana es la principal, existen otras muchas que condicionan a la Familia Real.
En esta ocasión, Letizia ha impuesto una regla que tendrá efectos en su relación con el rey Felipe.
La vida en pareja requiere de sacrificios para su correcto funcionamiento, pero Letizia lo ha llevado a otro extremo.
Su bien existe una razón lógica en su decisión, esto no exime que sea cuanto menos curiosa.
La reina Letizia, el rey Felipe y una relación en riesgo
La vida de los miembros de la Familia Real está siempre llena de curiosidades y misterios.
La reina Letizia y el rey Felipe no escapan de ello y su día a día gira en torno a protocolos, normas y directrices.
La mayoría impuesta por su papel en la institución, pero otras han sido orquestadas por ellos mismos.
Por ejemplo, la regla que ha impuesto la reina Letizia que afectará a su relación con el rey Felipe: dormir en habitaciones separadas. Esta información ha salido a la luz tras su reciente viaje a Navarra, donde se alojaron en un reconocido hotel de la zona. Según cuentan los testigos, la reina Letizia y el rey Felipe se alojaron en habitaciones separadas.
Expertos en la realeza, como Silvia Taulés, explican que esta práctica suele ser habitual en la mayoría de miembros de la realeza.
La idea de que una pareja real duerma en habitaciones separadas en un hotel es, cuanto menos, llamativa. Sin embargo, esta práctica no es nueva en la realeza y suele darse habitualmente.
Para muchos, esta costumbre puede generar tensiones en la relación.
Pese al estatus real, compartir intimidad y cercanía resulta imprescindible para el buen funcionamiento del matrimonio.
Dormir siempre por separado puede reforzar cierta distancia emocional, dificultando la complicidad diaria.
No obstante, pese a los riesgos, el rey Felipe acepta la regla de la reina Letizia y pernocta en su propia habitación.
Y es que tener un rincón íntimo en sus agendas oficiales también podría resultar beneficioso. Sobre todo, en lo relativo a la seguridad.
El sacrificio del rey Felipe por el bienestar de la reina Letizia
Uno de los motivos principales que sustentan la norma de la reina Letizia para no dormir con el rey Felipe es la seguridad.
Del mismo modo que nunca vuelan en el mismo avión, alojarse en habitaciones distintas cuando están fuera de Palacio es normal.
“Normalmente, se hace por seguridad porque si pasa algo es mejor que solo le pase a uno y no a los dos”, explica un experto.
Desde el punto de vista de la relación, Letizia puede beneficiarse de ese espacio propio para preservar su identidad más allá de su rol. Lo que supone un punto a su favor.
Hay que tener en cuenta que, en cuanto a logística y preparación, tanto a la reina como al rey Felipe les resulta cómodo dormir separados.
Mientras Felipe puede tener compromisos de última hora o reuniones extendidas, la reina Letizia necesita tiempo para descansar o prepararse sin interrupciones.
Que cada uno cuente con su alcoba facilita que estas gestiones individuales se realicen sin prisas.
Otra de las costumbres que la reina Letizia y el rey Felipe comparten es su protocolo a la hora del desayuno.
Los hoteles suelen contar con buffet y son pocos los que deciden saltárselo, los reyes tampoco lo hacen, pero siguen una pauta.
Ver a la Familia Real desfilando con su bandeja por el comedor puede crear un caos con el resto de clientes del hotel.
Por ello, jamás veremos a la reina Letizia y al rey Felipe en esta tesitura.
En su lugar, mandan que les suban el desayuno a sus respectivas habitaciones para mayor tranquilidad.
